ocurrió en Misiones

El hombre que murió tras golpiza en patrullero tenía aplastamiento de tórax

La víctima, identificada como Carlos Raúl Girula, fue atacada el sábado cuando era trasladada bajo arresto a la comisaría tras protagonizar un incidente en un motel que derivó en una violenta intervención policial para reducirlo.

Por Sección Policiales

El hombre de 33 años que recibió una feroz golpiza en un móvil policial, en Misiones, murió por una hemorragia pulmonar causada por "aplastamiento de tórax", ocasionado a su vez por "pisotones y patadas", ya que fueron halladas marcas de suelas de borceguíes, confirmaron hoy fuentes judiciales.

La víctima, identificada como Carlos Raúl Girula, fue atacada el sábado cuando era trasladada bajo arresto a la comisaría tras protagonizar un incidente en un motel que derivó en una violenta intervención policial para reducirlo.

En el hecho intervinieron por lo menos nueve efectivos, que lo cargaron en la carrocería de una camioneta patrullera, donde habría continuado la golpiza que le provocó la muerte. 

La autopsia precisó que la causa de su muerte fue una hemorragia pulmonar producida por "aplastamiento de tórax, ocasionado por pisotones y patadas con borceguíes", cuyas suelas quedaron marcadas en la piel de la región torácica, según reveló el informe médico, informaron fuentes judiciales.

Las pericias también determinaron "marcas claras de golpes y puntapiés en el cráneo y otras partes del cuerpo".

El juez Marcelo Cardozo dispuso la detención de tres jefes de unidades, dos oficiales y seis suboficiales, además de la incautación de los uniformes de los efectivos involucrados directamente en el procedimiento.

En tanto, desde la cúpula de la policía provincial se ordenó el pase a disponibilidad de los uniformados y de los jefes de las unidades que intervinieron.

Girula, un albañil y padre de cuatro hijos, fue agredido en la madrugada del sábado pasado por un grupo de policías tras protagonizar un incidente en un motel alojamiento de Posadas, al negarse a abonar una botella de whisky, situación que derivó en una violenta intervención policial para reducirlo y trasladarlo.

El hombre fue esposado en medio de un fuerte ataque por parte de por lo menos nueve efectivos, quienes lo cargaron en la carrocería de una camioneta patrullera, donde habría continuado la golpiza que le produjo la muerte.

Al arribar a la sede policial, los efectivos intentaron descender al detenido del vehículo, pero se dieron cuenta de que había fallecido, por lo que se habría desatado un confuso operativo con el propósito de ocultar el hecho, como el lavado de la carrocería del móvil.

Sin embargo, las pruebas con "luminol" realizadas en el rodado y en otros dos que se utilizaron en el procedimiento, habrían confirmado la presencia de restos de sangre, sustancia que también se encontró en el patio de la comisaría por donde fue arrastrado el cuerpo de Girula, confirmaron las fuentes.

Los restos del albañil fueron inhumados en el cementerio de Posadas, ocasión en que su viuda, Nora Acosta, de 37 años, pidió en diálogo con los medios que "se aclare bien qué pasó y quiénes fueron los responsables".

"El no se merecía ese maltrato. Lo golpearon de manera bestial, aún cuando ya estaba esposado. Eso es lo que nos causa este dolor tan insoportable, porque él era un hombre que se desvivía por sus hijos, una persona alegre y trabajadora. No merecía ese final", lamentó la mujer.

Fuente: DyN

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